El Alimoche acude en ayuda de Garzón

Si. Ya sabemos que nuestros lectores pensarán que a este tipo que lo zurzan. Y en el fondo tienen Vds. razón, pero piensen en el palo que le han pegado los "fascistas" de Tribunal Supremo por meterse donde nadie le llama. Y encima va el "Conejo Superior del Joder Judicial" (como un dia indicó el BOE) y le impone una exorbitante multa de CIEN EUROS por haber dejado escapar a dos capos de la mafia de la droga. O sea, que el pobre está hundido.

Y como nosotros somos caritativos, le vamos a proporcionar un buen trabajo de investigación en el que podrá desenvolverse bien con sus aptitudes y aumentar su prestigio como jurista, del que se enorgullecen algunos de sus compañeros de profesión. Además se trata de algo ocurrido, casualmente, a unos paisanos suyos. He aquí los hechos:

El dia 12 de agosto de 1936 ingresaban en la Carcel Modelo de Madrid los 40 supervivientes de la masacre que se produjo en el andén de la estación de Vallecas al llegar, procedente de Jaén, con unos 300 presos destinados a las cárceles madrileñas. Algunos de esos supervivientes relataron a sus compañeros de cárcel lo que había ocurrido.

El tren que, entre otros presos, llevaba al Obispo de Jaén D.Manuel Basulto Jiménez en unión de su hermana y del Vicario General de la Diócesis D. Félix Pérez Portela, salió de Jaen el dia 11 de agosto para dejar a los presos en Alcalá de Henares con objeto de que ingresaran en aquella prisión. Estaba custodiado por fuerza armada, y a lo largo del trayecto fueron maltratados en las estaciones por donde pasaban por grupos de chusma que les insultaban y les tiraban piedras.

Al llegar el convoy a la estación de Villaverde (Madrid), fué detenido por los marxistas que exigían la entrega de los presos para asesinarlos. El Jefe de la fuerza que custodiaba a los detenidos telefoneó a Madrid y habló con el Ministro de la Gobernación rojo, y el resultado fué que la fuerza abandonó a los presos, dejando en poder de la chusma a los ocupantes del tren, que fué desviado de su trayecto a Madrid y llevado a un ramal de circunvalación hasta las inmediaciones del Pozo del Tio Raimundo.

Los presos fueron bajados del tren y colocados por tandas ante un terraplén donde con tres ametralladoras fueron asesinados. La única mujer que había en el tren era la hermana del Obispo, Dª Teresa Basulto Jimenez, que fué asesinada individualmente por una miliciana que se ofreció a hacerlo, llamada Josefa Coso, alias "La Pecosa", que disparó su pistola sobre la mencionada señora produciéndole la muerte instantánea.

El espectáculo fué presenciado por unas dos mil personas que aquel 12 de agosto de 1936 se habían concentrado en el lugar, y tras los esesinados vino el saqueo de los objetos de valor que podian encontrar. Parte de esta rapiña fué llevada al Comité de Sangre de Vallecas, cuyos dirigentes fueron, con otros, los máximos responsables de este crimen.

Estos datos los hemos sacado de "Alto y Claro", y proceden de la Causa General.