Habla el maestro

El hombre que estuvo al frente del Gobierno español durante catorce años y nos dejó a todos los españoles en cueros vivos, hasta el punto de que hubo necesidad de pedir un crédito bancario en cuanto Aznar se hizo con el poder, para pagar las pensiones, acaba de sentenciar lo siguiente:

Y esto se atreve a decirlo el primer gobernante de España cuando se produjo el vergonzoso asunto de Rumasa, que le costó la vida al Primer Presidente del Tribunal Constitucional, recien llegado de Venezuela, y que tuvo que regresar allí una vez terminado su trabajo para morir de vergüenza. Porque entonces todavía había hombres que morian de vergüenza.

Pues menuda la forma en que quedamos cuando el pájaro en cuestión tuvo que soltar su mandato después de la mugre que había llegado a flotar sobre las aguas de este desgraciado pais. Aquí tienen al "interfecto" (es un decir) saludando cordialmente al Presidente Ahmadineyah, que es un gran amigo de España. Y no sólo de España, sino de todo el mundo occidental. Algún negociejo habrá por medio. Y es que el hombre que se vestía de obrero en los mítines del PSOE, ahora solo alterna con los grandes financieros del mundo.

No vamos a salir nosotros en defensa del impresentable Zapatero, que nos está poniendo en ridículo a todos los españoles, porque en el resto de Europa hay quien cree que todos los españoles le hemos votado. Y es que El Presidente por Accidente ha reunido a su alrededor una curiosa colección de Ministros y consejeros que podrían ser unos excelentes vendedores de chucherias. A mi me recuerdan a aquellos vendedores que iban por el Viejo Oeste americano, de pueblo en pueblo, vendiendo el "Kikkapoo indian liniment" que era una especie de Bálsamo de Fierabrás que lo mismo servía para atender a un caballo como a una mujer embarazada. Un tipo que solía aparecer en muchas películas del Oeste.

Para nadie es un secreto que el tinglado sociata se está cayendo como un castillo de naipes porque no hay guapo que se atreva a enderezarlo. Son demasiadas cosas a enderezar, y de ahí esa campaña feroz contra el PP, esa propaganda en desprestigio de la Iglesia y esa Educación para la Marranería, que ha de ser uno de sus principales apoyos en una sociedad carente de valores y de vergüenza.

Pero... ¡si hasta Antonio Casado se ha atrevido a tratar el tema de la Iglesia en El Confidencial! Y le ha salido una retahila de contestaciones que llegan, o pasan, de las 300.