De la prensa

Yo no lo quito

1.-Necrológica

Esta semana los periódicos han anunciado el fallecimiento en Roma, a sus 92 años, de la actriz de cine Maria Mercader del Rio, viuda de Vittorio de Sica, con quien se casó cuando Vittorio hubo conseguido el divorcio de su primera mujer.

Poca gente habrá tenido ocasión de ver las películas en que intervino porque, tras tener dos hijos, su marido le pidió que dejara de trabajar. Y solo después de la muerte de Vittorio trabajó en alguna película de su hijo Cristian, también director de cine, como su padre.

Pero es todavía más probable que la gente ignore que esta mujer era la hermana menor de Ramón Mercader, el asesino de Trotsky; asunto éste con el que María, por supuesto, no tuvo nada que ver.

Esta actriz española era hija del matrimonio de Pablo Mercader, un aristócrata barcelonés, y Caridad del Rio, más conocida como Caridad Mercader, que fué una exaltada comunista que habia nacido en Cuba cuando ésta era todavía española, y de la que se cuenta que el 19 de julio de 1936 estuvo actuando por las calles de Barcelona. Entonces ya estaba divorciada de su marido. Stalin concedió a Caridad y a su hijo Ramón la distinción de héroes de la Union Soviética.

Esperamos que el Señor haya concedido el descanso eterno a esta mujer que fué una esposa amante de su marido, y cuyo fallecimiento nos ha hecho rememorar aspectos de la Historia de España en las que ella no tuvo ninguna participación.

2.-ZP deshauciado

Ya es del dominio público. Tanto, que hasta el vicepresidente Chaves, incapaz de estar calladito ha tenido que decir que hubiera preferido que ZP continuara como Presidente. O sea, que ya lo han deshauciado entre todos. Que en estos momentos están buscando la manera de seguir en el cotarro una vez desprendidos de Zapatero.

Y como quien aparece como sustituto es nada menos que Rubalcaba, esto quiere decir que salimos de Guatemala para entrar en Guatepeor. Esperemos que sea por poco tiempo.

Y es que, como dice Federico, éste mete la mano en la licuadora y sale zumo de víbora.

A nosotros nos resulta difícil creer que a este tiparraco, que ha investigado la vida y milagros de tantos políticos con la inestimable ayuda de la policía gubernamental, le preocupe mucho esta noticia

El tiempo dirá si tenemos o no tenemos razón al pensar así.