el sentido del ridículo

1.- El final de Artur Mas.

Una de las cosas que más llaman la atención al que viene a Cataluña es la falta de sentido del ridículo que tienen muchos catalanes. Porque una cosa es el amor a la patria chica y otra el desmesurado entusiasmo por cosas que todo el mundo sabe que no son más que cuentos. Sobre todos los que aparecieron durante la Renaixensa, y que llegaron a indignar a un famoso historiador catalán, Vicens Vives, que, pese a ser él mismo un catalanista, se tuvo que enfrentar con los de su época, precisamente porque él sí tenía sentido del ridículo y, sobre todo, amor a la verdad.

Incluso entre la gente catalana que tiene dos dedos de frente, existe un calificativo para aquellos que viven sus propias fantasías. Les llaman "somia truites" , que quiere decir "sueña tortillas". Y este calificativo se podría aplicar a todos los seguidores del actual presidente de la Generalidad, que no hace más que meter la pata desde hace ya varios años.

Las últimas encuestas están poniendo en evidencia que CiU está perdiendo votos  que van a parar a Esquerra Republicana. Es decir, de un catalanismo burgués a un separatismo popular. Por eso no es de extrañar que Oriol Junqueras está tan contento ayudando a Más, y llegando a decir que es el personajeque más necesita Cataluña en estos momentos. Por lo menos, el que más necesario es para él.

Por eso, en vista de lo que se le viene encima a CiU, entre Jordi Pujol y Durán Lleida están intentando apaciguarlo. No hay más que ver esta imagen  que  refleja muy bien la expresión de los tres protagonistas. Que cada cual piense lo que quiera, pero a nosotros nos lo dice todo.

Y es que últimamente se está empezando a plantear una alternativa a la independencia que sería un diálogo amistoso con el Estado a la espera de que éste sea "generoso" con Cataluña. Y ya sabemos que "Cataluña" son ellos. O sea, que de independencia, nada.

2.- "Volem Papes catalans".

Hace años, cuando fué nombrado Obispo de Barcelona don Marcelo González Martin, el clero catalanista, que ya empezaba a despeinarse, organizó unas manifestaciones al grito de "¡Volem bisbes catalans!". Y bajo una de aquellas pintadas que se veian por las calles, apareció otra que decía: "Como somos mayoría, lo queremos de Almería".

Pues aquellos mismos, que ahora ya son mayorecitos, piensan que un buen Papa seria el actual cardenal Martinez Sistach. Y se está iniciando una campaña( más bien campañita) bajo el lema de "Volem Papes catalans". Y para que no vean que les estamos engañando (no sean desconfiados, hombre) aquí tienen esta imagen que aparece en el blog titulado el debat.cat diari digital de catalunya.

En este diario se afirma que de los cinco cardenales españoles que van a estar en el Cónclave, el mejor situado y con más prestigio en la curia romana, es Martinez Sistach. Sobre todo " por el reconocimiento de la capitalidad de Barcelona" por la entronización de la basílica de la Sagrada Familia por el Papa Benedicto XVII.

 Además, si el nuevo Papa fuera un barcelonés, abriría la puerta a futuras elecciones de papas sudamericanos, lo que se está reivindicando desde hace años.

O sea, que soñar tortillas es barato y no hace daño a nadie.