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Yo no lo quito

Tras el fracaso de las últimas elecciones en este 20 de diciembre de 2015, nos viene a la memoria una frase leída hace pocos días en la que se decía que para formar un estado no hace falta Dios, pero si Dios falta lo que resulta es un infierno. Y esto es lo que ha ocurrido sin remedio. Por lo que a Mariano Rajoy se refiere, bien podemos decir que quizás Mariano se haya salido con la suya, pero el PP ha quedado destrozado. El resto de los partidos parecen empeñados en no permitir que se pueda gobernar; y es que son los partidos sin Dios. Por eso no debe extrañarnos que, como ocurre en Cataluña, el partido con más votantes haya sido Podemos; el partido bolivariano. Como si Cataluña tuviera algo que ver con Venezuela. Y es que como dice un viejo refrán latino, "Quos vult perdere Deus prius dementat". Desde hace tiempo se veía venir el hundimiento de Artur Mas y el de Mariano Rajoy; y estas elecciones no han hecho más que ratificarlo. Y de los dos se podría decir lo mismo que Esperanza Aguirre ha dicho de su partido; "Nos ha perdido la corrupción".

A lo largo de estos meses de 2015, y ante el peligro de la invasión islámica, hemos podido oir a algunos de nuestros políticos que Europa debe su cultura a las bases cristianas que la han formado a lo largo de varios siglos. Pues bien, si nos referimos a España, apenas encontramos la menor referencia a nuestra formación cristiana en los `programas de nuestros políticos. En el mejor de los casos, "se tolera" la educación cristiana, lo mismo que las demás. O sea, que queremos ser europeos, pero sin la base fundamental de nuestra cultura.Y podríamos empezar por el Presidente del Gobierno, que ha llegado a confesar que era "católico no practicante", que no sabemos en qué puede consistir eso. Tampoco sabemos de ningún ministro de este gobierno, salvo Fernández Diaz, que asista los domingos a misa dando fe de su condición de católico practicante. El único partido de todos los que aparecen que ha confesado su condición de católico ha sido Vox.

Y a título de recuerdo, para nuestra memoria histórica,traemos aquí este comentario del canciller Otto von Bismark, buen conocedor de la historia de España

"La nación más fuerte del mundo es, sin duda, España. Siempre ha intentado autodestruirse y nunca lo ha conseguido. El día que dejase de intentarlo volvería a ser la vanguardia del mundo,"