Yo no lo quito
Quizás por haber sido ayer el aniversario de la proclamación de la Segunda República española, a este Asno le trae a la memoria un hecho que tuvo ocasión de presenciar en su niñez, y del que poco se habla por los actuales "historiadores" de nuestra guerra, posiblemente porque tuvo más bien poco de glorioso. Sin embargo se trata de una unidad singular formada por anarquistas, que recibió el nombre de "Batallón de la muerte".
Acostumbrados como estábamos a ver desfilar por las calles durante los primeros mees de la guerra a aquellas columnas que salían de Barcelona para dirigirse al frente de Aragón faltos de uniformidad y en "columna de barullo", la singularidad de aquella unidad anarquista consistía en que posiblemente ha sido la mejor uniformada que ha desfilado por las calles de Barcelona. Fué en marzo de 1937.
Aquella mañana de marzo quienes caminábamos por el centro de Barcelona pudimos comtemplar esta unidad que formó en la Diagonal, bajó por el Paseo de Gracia, Plaza de Cataluña, Ramblas, calle de Fernando y Plaza de la República, donde la esperaban el Presidente de la Generallidad Luis Companys, el primer Consejero Josep Tarradellas y el consejero de Economía, el anarquista Abad de Santillán, que era el que la había organizado. He aquí un par de vistas de aquel desfile
Como puede verse, desfilan sin armamento; el uniforme era de un color verde oliva,camisa negra sin cuello, y boina negra. Algo parecido a aquellos "arditi" antifascistas italianos. También llevaban al cinto un "pugnale" de estilo italiano.
El Presidente Companys dirigió el acto de promesa a los nuevos combatientes."¿Prometeis luchar hasta vencer o morir, a luchar y vencer al enemigo hasta el sacrificio de vuestras vidas?" Los componentes del batallón respondieron "¡Si!" levantando sus puñales al aire.
Aquel batallón estaba formado por unos 600 hombres, sobre todo italianos exiliados en Francia. Su presencia en Barcelona aquel día causó mucha impresión en la ciudadanía a causa de sus uniformes y su apariencia casi fascista, que había sido formado y equipado por Diego Abad de Santillán. El período de instrucción tuvo lugar a poca distancia de Barcelona, en una finca que había sido propiedad de don Miguel Gomis y Güell, situada en la población de Santa Perpetua de la Mogoda, y que a principios del siglo XX fué reformada por su propietario imitando modelos como la puerta de entrada de Poblet y las murallas de Carcasona. Aquella propiedad, conocida como Can Tió, fué requisada por la Generalidad y luego cedida a los anarquistas como centro de instrucción del Batallón de la Muerte. Aqui tenemos un par de vistas de aquella finca
El jefe del batallón era un italoargentino llamado Cándido Testa, que estaba asesorado por varios "expertos" anarquistas como Emilio Strafellini, Nicola Menna, Fausto Nitti, Camilo Bernieri , y otros..En esta otra imagen puede verse a Diego Abad de Santillan con Cándido Testa y Strafellini.
Tras este desfile y promesa a la bandera, el batallón salió para el frente de Aragón, sufriendo dos revolcones, el primero en Almudévar y posteriormente otro en Montalbán. A continuación los trasladaron para la operación de toma de la ermita de Santa Quiteria, cerca de Tardienta, y en estos combates la unidad fué aniquilada y sus restos distribuidos entre la 142 Brigada Mixta, en la 32 División, el batallón "Garibaldi" y otras unidades.
Y no se volvió a saber más de aquel batallón que los actuales "historiadores" eluden mencionar. Por cierto, que una de las unidades que contribuyeron a destrozarlo en su ataque a Santa Quiteria la mandaba el entonces Comandante don Santiago Amado Loriga, que fué general Director de la Academia General Militar de Zaragoza.
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