El Alimoche: Colón

Yo no lo quito

1.-Cristina Kitchener contra Cristobal Colón.

La verdad es que no gana uno para sustos. Ahora resulta que la Presidenta de la República Argentina envía a la reserva al ínclito navegante Cristóbal Colón. O sea, que desmonta la estatua que este navegante tiene en medio de Buenos Aires y la expulsa de la capital de la República, a pocos metros de la Casa Rosada, para colocarla en Mar del Plata.

Como la estatua fué subvencionada en parte por el gobierno italiano y en parte por los argentinos de origen italiano que viven en Buenos Aires, huelga decir que esta nueva estupidez de la Presidenta ha provocado el malhumor de los argentinos de origen italiano, que son muchos.Pero pese a todo, la operación está en marcha, como puede verse en esta imagen

Y aunque algunos estamentos de la República han declarado que esta operación es ilegal, ello no es obstáculo para que La Presidenta se salga con la suya, que para eso es la jefa.Y como uno se pregunta qué es lo que se va a colocar donde hasta ahora estaba el monumento, les diremos que se va a instalar otro en memoria de doña Juana Azurday, de Padilla.

¿Y quien era esta señora? Pues la viuda de un general independentista que combatió a los españoles; y que al morir su marido se convirtió en Coronel de las fuerzas insurgentes que mandaba hasta entonces su marido. A decir verdad, esta señora era tan brava que al cabo de los años Belgrano la nombró Teniente Coronel del Ejército Argentino, y así está representada en esta retrato de su época. Y como entonces no estaban delimitadas como ahora las fronteras de las repúbicas sudamericanas, resulta que dona Juana hoy sería boliviana, porque había nacido en Chiquisaca, provincia de Sucre. Pero esto son minucias.

Minucias que no ha tenido en cuenta el señor Presidente de la República de Bolivia, Evo Morales, que es el que ha tenido la gentileza de regalar la nueva estatua a la República Argentina porque doña Juana fué una luchadora por la libertad y aquel desgraciado de Cristóbal Colón, al fin y al cabo, era un "mandao" del Rey de España. Además se profesan ambos una gran amistad.

No tenemos noticias de que el gobieno italiano que regaló la estatua de Colón a los argentinos haya protestado por esta expulsión. Pero son tantos los problemas que tiene que afrontar en este momento, que no nos extrañaría nada su silencio.

En cambio sí creemos que el notable historiador de Arenys de Mar, señor Jordi Bilbeny debería protestar por esta ofensa a un compatriota suyo que no sólo nació en Barcelona, sino que era príncipe de Cataluña como demuestran sus investigaciones. Y más aún cuando el Club de Fútbol Barcelona, acaba de nombrar "culér honorari" a aquel gran hombre que cambió la Historia del Mundo.