Yo no lo quito
1.-La primavera islámica.
Mientras la mayor parte de la prensa occidental mira con simpatía a los rebeldes de Siria, que no son más que fanáticos islamistas, lo mismo que los que han derrotado a Gadafi con ayuda de Francia, Inglaterra y, en parte también de España, Occidente está encantado con eso de que se pueda derribar a un dictador sirio. Y es que en este mundo cualquier sistema político, o religioso, es válido, menos la dictadura. Por eso los imbéciles de occidente alaban y ayudan a los rebeldes sirios, pensando quizás que acaban de inventar la "democracia islámica". Y es que, como dice el Ecclesiastés; "Stultorum infinitus est numerus". Mucha estulticia vemos en Occidente.
¿A nadie le recurrda nada esta bonita imagen? Pues a los que llevamos bastantes años de andadura por este valle de lágrimas nos recuerda esta otra
La unica diferencia es en el lugar y el tiempo. La primera foto está tomada en el año 2012, y la segunda en 1936. La primera en Siria, y la segunda en España.
2.-Condecoraciones.
A los políticos sociatas, tan partidarios ellos de eliminar las cruces en los colegios, les encanta colgarse ellos las cruces. Pero si se quitan las cruces de los colegios, también deberian ellos rechazar las cruces que se han de colgar del pecho. Son cosas de la política que los pobres ignorantes que somos no acabamos de entender
Por ejemplo, a la Ministra de Igualdad, Excelentísima Señora Bibiana Aido, el gobierno actual le ha concedido la Gran Cruz de Carlos III, como a todos los ex-ministros del desgobierno anterior. Por lo que se ve, eso es preceptivo.
Lo que no deja de tener su gracia es que esta condecoración, cuyo lema es :"Virtute et Merito", está decorada con la imagen de la Inmaculada Concepción, y acompañada por una banda de color azul "purísima". Y no nos extrañaría nada que de esta cruz se saliera la imagen de la Virgen Maria para darle un coscorrón a quien asegura que: "un feto es un ser vivo, pero no un ser humano". O sea, que puede ser destruido porque la madre tiene ese derecho.
Pero el mundo en que vivimos es así de disparatado.
Claro que a condecoraciones le gana la Excelentísima Señora Leire Pajin que, a la Gran Cruz de Carlos III, encima puede añadir la Orden del Aguila Azteca, que es la máxima condecoración mejicana que se puede conceder a un extranjero, o extranjera.
Pero no nos indignemos porque a Zapatero y a Chaves les han colgado nada menos que la Orden de Isabel la Católica.
Esperemos que no vayan por la vida luciéndola.
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