El Alimoche: Albricias

Yo no lo quito

Hoy, dia 13 de mayo del año del Señor de 2016, este Asno hispanohablante puede decir a sus lectores que tenemos albricias porque la futura Constitución de la República Catalana le autoriza al empleo de su lengua por el hecho de haber nacido antes de 1977. Es así que este Asno, servidor de ustedes, nació el día 2 de febrero de 1923 y este año ha cumplido ya los 93 tacos, va a poder seguir utilizando en Cataluña el idioma materno gracias a la generosidad de la Constitución de la todavía no nata República Catalana

Esta imagen ofrece el momento histórico en que la Presidenta del Parlamento Catalán Carme Forcadell recibe el ejemplar de la Constitución catalana recién salida de la imprenta.

Lo que no sabemos es si la constitución nos permitirá considerarnos catalanes por el hecho de haber nacido en Barcelona.Y si no fuera así tendríamos que lamentarnos porque ser catalán es algo muy importante, como decía el insigne filósofo Francesc Pujols Morgades, a quien alguien calificó irrespetuosamente como "el último cantamañanas" que escribió lo siguiente:

"...si bien es muy cierto que nosotros no lo veremos, porque ya estaremos muertos y enterrados, también es cierto que los que vendrán después de nosotros,verán como los reyes de las tierra o quienes gobiernen en las naciones, se arrodillarán ante Catalunya; entonces será cuando, los que hayan leído este libro, si aun queda algún ejemplar, comprenderán cuanta razón tenía su autor cuando,riendo riendo,decía las cosas más serias que se pueden decir, pues estamos persuadidos en que en tiempos venideros, si las cosas no cambian y van por el camino que van, de los catalanes se dirá que son "los compatriotas de la verdad" y todos los extranjeros nos mirarán como si mirasen la sangre de la verdad, y cuando darán la mano a un hermano nuestro, además del respeto y admiración que le profesarán, les parecerá que tocan la verdad con las manos y, dado que muchos se echarán a llorar de alegría, los catalanes deberemos enjuagarles los ojos con el pañuelo, y ser catalán equivaldrá a tener todos los gastos pagados por donde quiera que vaya, y bastará con ser catalán para que la gente le aloje en su casa o le pague la fonda que es el mejor obsequio que se nos puede hacer a los catalanes cuando vamos por el mundo, y bien mirado, más valdrá ser catalán que millonario y como las apariencias engañan, aunque sea más ignorante que un burro, cuando los extranjeros verán a un catalán, pensarán que es un sabio que lleva la verdad en la mano, y esto hará que cuando Catalunya se vea como reina y señora del mundo,nuestra fama sea tanta, y tanta la admiración que se nos tendrá por todas partes, que habrá muchos catalanes que, por modestia, no se atreverán a decir que lo son, y se harán pasar por extranjeros".