Vandellós

No. No pensamos tocar el tema de las centrales nucleares, sino dedicar unas lineas al abogado y sociólogo Josep Anton Vandellós, autor en el año 1935 de un librito titulado "Catalunya, poble decadent" en el que hace un estudio demográfico de la poblción catalana de aquella época

El conocimiento de lo que en aquel libro se exponía, llevó al Asno de Rotterdam a afirmar, hace más de treinta años, entre bromas y veras, que llegaría el dia en que el Presidente de la Generalidad de Cataluña se llamaría Jordi Vargas Heredia.

Los que me escuchaban se reían como diciendo :"Qué cosas tiene este señor" (o este "tio", como me llamasen más familiarmente)". Y debo reconocer que estaba equivocado, porque a lo que se ha llegado es a que el actual Presidente de la Generalidad de Cataluña no se llame Jordi. sino Pepe; que no se llame Vargas Heredia, sino Montilla, y que, además no ha nacido en Barcelona, sino en Iznajar, provincia de Córdoba.

Una de las cosas que nos dice Vandellós es que una gran parte del crecimiento de la población catalana se está efectuando en función de las corrientes inmgratorias: "La inmigración de otras tierras nos permite acelerar el ritmo de crecimiento y nos da la apariencia de un pueblo con gran vitalidad". Esto decía en el año 1935 cuando por aquellas décadas el 34,4% del crecimiento de la población se debía al crecimiento natural y un 65,6 % al aumento de la inmigración.

Esta crisis de la natalidad sería tanto más sensible cuanto que la población autóctona crece escasamente. "La causa principal de la decadencia demográfica de Cataluña hemos de buscarla en la crisis de la natalidad"(pag.157) originada por un complejo de factores entre los que destacan los económicos y los psicosociales.

"Un aumento en los ingresos comportará, muchas veces, que los matrimonios piensen en la obtención de un mayor número de comodidades y no en el incremento del número de hijos. Y ha de tenerse en cuenta que cada dia crece la cantidad de gastos que, con frecuencia, pueden ser considerados como superfluos o de lujo. El gramófono un día, la radio después, el automóvil, los viajes, las diversiones, he aquí algunos de los enemigos de las familias numerosas"(pag. 186).

¿Qué pensaría Vandellós de lo que está ocurriendo estos años en Cataluña cuando un parte no despreciable de esta población es, además, de origen norteafricano y muy celosa de su cultura islámica?

Todo esto nos viene a la mente después de haber presenciado la payasada de Arenys de Munt.

Ahora bien, suponer que en Cataluña no hay familias numerosas es un error. Las hay con ocho y hasta nueve hijos, al menos entre entre nuestras amistades. Claro que son familias con una sólida formación católica que no tienen nada de "progre" ni relación alguna con la "iglesia catalanista". que es otra de las lacras que padecemos en Cataluña. A estas familias numerosas que con tanto esfuerzo y tanta renuncia tienen que vivir, un cariñoso saludo y una felicitación por su gallardía y por esos hijos e hijas tan guapos que tienen. Que da gusto verlos.