De susto en susto

Si, ya sé que uno no debe dedicarse a explicar a la gente sus males. Aquí cada cual tiene los suyos, y los aguanta. Además es tiempo penitencial y no está nada bien eso de hacer partícipe a los demás de tus males. Pero es que ocurren cosas rarísimas.

Resulta que hoy es 23 de febrero, día de San Policarpo, según creo, y he recibido un envío curiosísimo que se refiere a alguien del que hace tiempo ya me había olvidado. Se trata nada menos que de una carta del Coronel Amadeo Martínez Inglés, dirigida al Presidente el Congreso. Se refiere a las investigaciones que está realizando sobre un personaje a quien denomina "el Borbón". Como estoy débil, medio sordo, y de no muy buen humor, he decidido olvidarme de ello.

Pero cuando uno se encuentra débil los fantasmas del pasado regresan, y he aquí que el otro día he tenido ocasión de tropezar con otro. Y he tenido que soportarlo nada menos que en la tertulia de Intereconomía. Se trata del General D. Manuel Fernández Monzón y Altolaguirre, ilustre militar y efímero Inspector General de la Policia Municipal de Madrid, del que todavía no he podido enterarme si lo de Afganistán es una guerra, una acción pacificadora en ambiente hostil, o Dios sabe que puñetas es eso.

Uno, que desde su adolescencia ya había leido algo de Clausewitz, y algo menos de Gneisenau y Scharnhorst, a quienes considero como verdaderos artífices del Estado Mayor prusiano, a estas alturas de la vida le importa poco que sea guerra o no sea guerra. Que la guerra sea "asimétrica", "simétrica" "homotética", "simétrica respecto a un punto o una recta" es algo sobre lo que no cabe discutir. Porque la verdad es que allí se lucha, se mata y se muere. Y eso es lo que importa.

Lo que me sorprende es que los de Intereconomía no hayan sido capaces de encontrar a alguien mejor calificado para explicar a sus oyentes estas sutilezas.


Ricardo.......no te rías, hombre. Que ya sé que me lees.