Los remedios de Artur Mas

Yo no lo creo

Leemos en la prensa los comentarios indignados de algunos periodistas al referirse a las  promesas preelectorales que el Molt Honorable President ArturMas acaba de hacer para llevarse el gato al agua en próximo 25 de noviembre. Pero como nosotros ya somos perros viejos (más viejos que perros) ya no nos asustamos de casi nada de lo que se ve y oye por estos pagos.

Las promesas que hace se podrian resumir de esta forma:

1.. La independencia procurará a Cataluña más ocupación..

2.- Tendremos una Cataluña más competitiva, innovadora e internacionalizada.

3.-Una Cataluña con más formación.

4,-Una Cataluña con más Estado del Bienestar.

5.-Una Cataluña más segura.

6.-Una Cataluña más sostenible

7.-Una Cataluña más hiperconectada.

8.-Una Cataluña más emprendedora.

9.-Una Cataluña con unas finanzas públicas equilibradas.

10.-Una Cataluña con una cultura y unas instituciones más presentes.

Lo que podría denominarse "Las diez promesas de Mas" como en su día se dijo de los puntos de Wilson o los puntos de Negrin, que ya uno no se acuerda de si fueron diez o catorce.

Estas afirmaciones, de momento indemostradas pero que no se pueden considerar indemostrables, ha producido unos comentarios tales que en este Alimoche no nos atrevemos a reproducir, porque suponemos que "algo" tendrá Artur Mas en la mano para atreverse a decir estas cosas en público. Y la razón es ésta:

Cuando este Asno era chiquitito, ya supo que por Barcelona corría una medicina fabulosa que la gente denominaba "ungüent de serp" (ungüento de serpiente) y que servía para quitar toda clase de dolores y otras cosas más. Y esto no era más que una medicina importada, como todo lo milagroso, de los Estados Unidos de América. Allí se vendía bajo diferentes marcas algunas de las cuales eran:

Uno que se vendía por el Old Wild West con el nombre de "Snake oil", y que se tradujo al catalán, con el nombre de "ungüent de serp". Y no lo utilizaban solamente los duros vaqueros del Oeste, sino también las señoras recomendaban a sus maridos que lo usaran.

Con el paso de los años, este Asno tuvo que viajar al Old Wild West, y allí pudo conocer la existencia del "Kickapoo indian liniment", del que adjuntamos algunos de los anuncios de su propaganda





Esta es la razón que nos impide reirnos de estas promesas porque ¿Quien está en condiciones de afirmar que el Molt Honorable no está en posesión de estas milagrosas medicinas?

Y más si el nombre de Kik-apoo es el de una hermosa jovencita india que incluso ha dado el nombre a una revista musical anericana.

Seamos prudentes y confiemos en que Artur Mas esté en posesión de esta medicina. Al fin y al cabo, ayer hablabamos del Bálsamo de Fierabrás, y nadie se ha escandalizado.