Yo no lo quito
Hoy nos suelta el periódico una noticia que nos retrotrae nada menos que al año 1100 antes de Cristo. Y es que el personaje que en aquella época vivía en tierra palestina era una mujer Juez. Para aclarar un poco las cosas tenemos que decir que el primero de los reyes de Israel fué Saul, y que antes de hubiera reyes los que gobernaban eran llamados Jueces. Pues bien, en aquellos años quien gobernaba en Israel era una mujer juez que se llamaba Débora; y su historia se cuenta en el libro de los Jueces, capítulos IV y V donde aparece el salmo más antiguo de toda la literatura hebrea.
Porque los "psalmos", palabra griega que significa canto o cantar, no sólo aparecen en el Libro de los Salmos del Antiguo Testamento. Incluso hay salmos en el Nuevo, como el "Magnificat" que aparece en el Evangelio de Lucas, pero no queremos aprovechar ahora esta noticia de la prensa para soltar nuestro rollito.
El caso es que los españolitos se quejan de que en España ya no hay jueces, y tienen una imagen muy mala de la justicia española. Nosotros no vamos a discutir eso, pero si afirmamos que si la gente opina que no hay jueces,.al menos tenemos "juezas"; y un brillante ejemplo de eso es Mercedes Alaya. Lo que esta mujer ha tenido que sufrir por causa de la justicia, presiones, insultos y zafiedades como la de Alfonso Guerra, el enterrador de Montesquieu, merece que nos detengamos para enviarle nuestros respetos y nuestro reconocimiento desde aquí.
Ojalá su ejemplo sirva para que en este pais antes llamado España la justicia empiece a resplandecer, porque la injusticia es una de las plagas que más se oponen a la paz.
Y ya es hora de ir acabando con las plagas.
Por eso en honor de esta moderna Débora cerramos esta página. Que ya habrá tiempo para tratar de otros temas.
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