El Alimoche: Una de "pijos"

Yo no lo quito

No sabemos si esta palabra, o "palabro", va a molestar a alguno de nuestros lectores. No se extrañen de esto, porque como uno es "antiguo", si siendo niño en presencia de mi padre hubiera pronunciado esta palabra, lo más probable es que hubiera recibido una regañina acompañada de algún coscorrón. Y no digamos de mi abuelo.

Pero todo cambia o, como decía Heráclito: " panta rei", y ahora hasta políticode permite llamar pijo al juez Santiago Pedraz. Y no sólo pijo, sino "pijo anarcoide". La verdad es que nosotros le diríamos muchas cosas más a este sucesor y discípulo del superjuez Garzón.Pero no hemos venido a eso, sino a hablar de pijos en general.

Porque en España abundan los pijos; y los definiremos diciendo que se trata de niños "bien" criados en la burguesía adinerada que se apuntan a la izquierda para convertirse en libertadores del mundo mundial o del universo universal. Un ejemplo es, ciertamente, Santiago Pedraz Gómez , hijo mayor del periodista Santiago Pedraz Estévez subdirector de la agencia EFE.

Pero de los niños pijos de la reciente Historia de España fué también el poeta Rafael Alberti. hijo de una familia de origen italiano y propietaria de una bodega de Puerto de Santa María.

A su padre, Vicente Alberti, el negocio no le iba bien, y tuvo que trasladarse a Madrid donde se dedicó a trabajar como corredor de vinos. Pero antes su hijo Rafael habia estudiado en el colegio que los jesuitas tenian en Puerto de Santa María hasta que el niño fué expulsado del colegio por "mala conducta" cuando estaba en cuarto de bachillerato. Al principio el futuro poeta abandonó los estudios y se dedicó a la pintura, copiando cuadros de los museos de Madrid hasta que murió su padre, que es cuando empezó a escribir poesias.

En 1930 Rafael Alberti se casó con otra "pija" que fué la que le inoculó sus ideas comunistas. Esta mujer, muy guapa por cierto, era la hija del coronel de Caballería don Angel León Torres, que apoyó a Primo de Rivera cuando la dictadura. La belleza de esta muchacha hizo que Alfonso XIII le comentara en broma a su padre que si todos los jinetes de su regimiento fueran como su hija, tendría la mejor caballería del mundo.

Aquella muchacha que era una de las primeras licenciadas en Filosofía y Letras que hubo en España, se llamaba Maria Teresa León Goyri; también era sobrina de la esposa de Menendez Pidal, María Goyri y ambos contribuyeron a su formación literaria. Los que la conocieron son los que han manifestado que fué ella quien condujo a Rafael Alberti al comunismo, aunque de éste último se podía esperar cualquier cosa.

En todo caso, dos ejemplares del "pijus hispánicus". Por cierto que esta mujer, que acompañó a Alberti incluso durante los cuarenta años de su exilio, al llegar a la vejez enfermó de Alzheimer y Alberti aprovechó para casarse con otra más joven mientras su esposa estaba recluida en un hospital donde murió el 14 de diciembre de 1988 en Majadahonda. Su sobrina, Teresa Alberti, le cerró los ojos y a su entierro acudieron sólo una docena de familares. Tenía 85 años.