Asuntos privados

Yo no lo quito

1.-Gasolineras.

Hoy es inevitable hablar del todavía Ministro de Fomento y portacoz del gobierno. Tan inevitable que en casi toda la prensa se habla de este tema; unos para quitarle hierro y otros para administrarle una buena dosis de él.

Consecuencia de lo que está ocurriendo en España es que todas las encuestas dan a entender que la derrota socialista del 20-N va a ser catastrófica. Y que, una vez más, lo que está dando esta ventaja que se atribuye al PP es la desvergüenza de los socialistas y la estupidez con que han contribuido a su propia derrota. Oscilando entre la estulticia y la desvergüenza.

El pitorreo es tal en este asunto de Pepiño que ya se está pidiendo que dejen en paz a las gasolineras porque las están llamando por teléfono para saber "si está ahí el Ministro de Fomento"; cosa que molesta bastante a los gasolineros, que en todo este asunto no tienen arte ni parte. Pero si pronto se despeja el secreto del sumario, como parecen indicar las noticias que nos llegan, lo más probable es que  aparezcan más detalles escabrosos.

De todos modos, a lo peor no ocurre nada.

2.-La Ley Sinde.

En Abril de 2009 se nombró a Angeles Gonzalez Sinde como Ministra de Cultura. Nombramiento un poco rarito, porque era como nombrar a Ester Koplovitz Ministra de Fomento. Y una de sus primera disposiciones fué la famosa Ley Sinde, que todos conocemos porque se ha discutido mucho sobre ella. Pero, a la vista de la catástrofe electoral que le espera al PSOE, ya ha decidido que no va a presentarse a las próximas elecciones en las listas del socialismo.

 Pero otro de los casos más vergonzosos con los que ha estado relacionada es en el asunto de la SGAE. No decimos implicada, sino relacionada, que no es lo mismo.

Por si era poco lo que se nos ha contado ya sobre la famosa SGAE y Teddy Bautista, ahora nos llega esta perla en la que se muestra la forma en que determinadas personas hacen uso del dinero que todos tenemos que pagar. Menos mal que esta Ministra de  Cultura no ha repetido lo que dijo su egabrense  antecesora; aquello de que el dinero público no es de nadie.

Pero mucha gente piensa así. Y por eso no podemos extrañarnos de esta noticia:

de la que pudiera deducirse que los médicos pueden encontrar por este procedimiento una solución que les impediría tener que recetar antidepresivos. Además,los catalanes, con Duran Lleida a la cabeza, no se tendrian que quejar de que no venden el "cava". Algo que debería aprender la actual Ministra de Sanidad para terminar de fastidiar a las farmacias. Una solución médica que debería tenerse en cuenta para unir de este modo lo útil y lo agradable.