Hoy, por fin, los sindicatos se han manifestado por las calles de Madrid. Nadie habla del número de manifestantes, pero si se tiene en cuenta que los sindicalistas "liberados"-esos que viven del sudor de los de enfrente- son del orden de los 290.000, no nos extraña que haya sido multitudinaria. Y como tal, teniendo en cuenta que a cada asistente le habrán debido pagar las treinta monedas (de 1 €) en calidad de "media dieta", a los que pagamos los impuestos nos ha costado la cosa, al menos , 8.700.000 euros de vellón. A los que hay que sumar el gasto del transporte, banderolas, etc.
Y una buena muestra de que por aquí ha pasado la manifestación de los que dicen que trabajan, es esta foto que da fé de que los empleados de la limpieza del Ayuntamiento de Madrid habrán tenido trabajo. Para eso está la tasa de basuras del Ayuntamiento.
El Alimoche se suma hoy a esta manifestación, aunque sólo sea "in pectore" por razones obvias, porque el Asno de Rotterdam ha estado siempre en contra de una clase de empresarios que son los de las salas cinematográficas, las que hace más de veinticinco años que no pisa, y a los empresarios esos que organizan sus charangas de música epiléptica, a las que jamás ha asistido. Y eso se debe a que uno ya no está para dar saltos mortales. Con darlos veniales, ya va que chuta.
O sea, ¡Muera el empresario!
Y no puede menos que aconsejar a la juventud que no se dedique a ser empresario, porque ya sabe lo que le espera. Siempre pensó que la mejor de todas las carreras era la carrera de San Jerónimo, pero la de "liberado" sindicalista todavía es mejor.
Cuenta la Historia que la imagen del rey David fué esculpida por aquel genio que se llamaba Michelángelo Buonarrotti (¡Qué tio!). pero eso fué antes de que David se hiciera liberado sindicalista, porque a partir de aquel momento, el "dolce far niente" y las buenas chuletas hicieron que Buonarrotti tuviera que esculpir una segunda estatua, que es ésta, que no aparece en los libros que se enseñan a los niños.
Tomen nota para estas Navidades.
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