Yo no lo quito
Ya hemos visto que la unión de izquierdas denominada Frente Popular ganó las elecciones generales el dia 16 de febrero de 1936. De aquellas elecciones este Asno de Rotterdam recuerda dos cosas: la primera fué la indignación de su padre cuando se enteró de que un conocido suyo, de la alta burguesía catalana, había votado a las izquierdas para ver " si de este modo el ejército se sublevaría". Esto del voto de parte de la derecha lo he podido leer años más tarde en algún artículo de prensa, aunque el tema no se ha tocado demasiado.
El segundo es una viñeta que había podido ver en una revista, donde se explicaba una anécdota de estas elecciones; y es que un hombre se había presentado en la mesa electoral acompañado de una cabra, y había obligado a que se aceptara su voto y el de su cabra. Esta imagen nunca se le ha borrado de la mente.
El ejército estaba soliviantado. Sobre todo, cuando veía que a sus oficiales se les insultaba cuando se encontraban en un café, o por la calle. Algo de ésto había ocurrido, por ejemplo, en Melilla, pero más fuerte fué lo de Alcalá de Henares. Aquí se habían producido enfrentamientos entre la chusma izquierdista y oficiales de Caballería. La cosa había llegado a tal extremo, que se dió orden a los dos regimientos de guarnición para que se trasladaran a Salamanca y a Palencia. La oficialidad se indignó y veinticinco oficiales fueron arrestados y enviados a Palma de Mallorca en prisión militar. Estos oficiales fueron un eficaz apoyo a los sublevados en Julio de 1936.
1.-La UME.
La Unión Militar Española se empezó a crear después de la Revolución de Octubre de 1934, en vista de lo que acababa de ocurrir. Era una unión secreta de oficiales comprometidos a intervenir si la izquierda revolucionaria se echaba a la calle. Pero como en España nada es secreto, el gobierno estaba enterado de su existencia y enseguida se formó la UMRE (Union Militar Republicana Española).
Por cierto, a la UME se habían adherido dos famosos militares de la Guerra Civil: el entonces Comandante Vicente Rojo Lluch y el General José Miaja Menant, de lo que puede dar fé este documento.
Miaja y Rojo
2.-La UMRA.
El fundador de la UMRA fué un tipo curioso que se llamaba Eleuterio Diaz-Tendero Merchán y era Capitán de Infantería. Curioso si se sigue su trayectoria porque había nacido en Consuegra (Toledo) en 1982 y fué seminarista hasta que al cumplir los 18 años se alisó en el Ejército como soldado voluntario.Estuvo en las operaciones de Melilla en 1909, ingresó en la Masonería donde ocupó puestos importantes, y más tarde en la guerra del Rif.
Al proclamarse la República, en 1931 se trasladó a Madrid. Participó en las operaciones de represión de "la Sanjurjada"; en 1934 fué defensor de militares amigos suyos que habian tomado parte en la revolución de Asturias, como el Capitán de la Guardia Civil Fernando Condés, también masón, y jefe de la patrulla que asesinó a Calvo Sotelo. En 1934 fué cuando fundó la UMRA, y en febrero de 1936 fué destinado a Madrid al Grupo de Infantería del Ministerio de la Guerra. desde se dedicó a recoger informaciones sobre las actividades de los oficiales de la UME.
El dia 16 de julio de 1936 visitó a Casares Quiroga para darle a conocer la información que la UMRA tenía sobre la actitud de muchos militares, señalando a Franco, Mola, Goded, o Yagüe. Casares Quiroga no le hizo caso.
Durante la guerra civil fué uno de los fundadores del SIM (Servicio de Información Militar) en 1937, y terminó la guerra con el grado de Coronel refugiado en Francia.. Entonces se afilió al Partido Comunista clandestino y los alemanes lo enviaron a Dachau, donde murió por causas desconocidas y acabó en el crematorio poco antes de la entrada de los americanos en aquel campo de concentración.
3.-La denuncia de Gil Robles en el Parlamento.
Para tener una idea de cómo transcurrieron los primeros cuatro meses y medio tras el triunfo del Frente Popular, el diputado José Maria Gil Robles, pronunció un discurso en el que hizo la denuncia de que entre el 1 de febrero y el 15 de junio de 1936 se habian producido los siguientes incidentes:
"160 iglesias destruidas, 251 asalto de templos, 215 agresiones, 69 centros políticos destruidos, 312 edificios asaltados, 114 huelgas generales, 10 periódicos de derechas destruidos,83 periódicos asaltados, 146 bombas entre otros" No sabemos si entre esas 215 agresiones a que se refería Gil Robles estaba también el asesinato de los hermanos Badía en el cruce de la calle de Muntaner con Diputación por unos pistoleros anarquistas a sueldo de Companys.
3.-La denuncia de Gil Robles en el Parlamento.
Para tener una idea de cómo transcurrieron los primeros cuatro meses y medio tras el triunfo del Frente Popular, el diputado José Maria Gil Robles, pronunció un discurso en el que hizo la denuncia de que entre el 1 de febrero y el 15 de junio de 1936 se habian producido los siguientes incidentes:
"160 iglesias destruidas, 251 asalto de templos, 215 agresiones, 69 centros políticos destruidos, 312 edificios asaltados, 114 huelgas generales, 10 periódicos de derechas destruidos,83 periódicos asaltados, 146 bombas entre otros" No sabemos si entre esas 215 agresiones a que se refería Gil Robles estaba también el asesinato de los hermanos Badía en el cruce de la calle de Muntaner con Diputación por unos pistoleros anarquistas a sueldo de Companys.
Unos dias más tarde resonaría en el Parlamento aquella frase de Dolores Ibarruri, "La Pasionaria" refiriéndose al que sería el último discurso de José Calvo Sotelo: "Este hombre ha hablado por última vez".
Por cierto que los modernos "historiadores" o no mencionan esta frase, o la niegan, pero tenemos el testimonio de otro José que ha manifestado que esta frase sí se pronunció. Se llamaba José Tarradellas, y dijo que él se sentaba cerca del escaño que ocupaba Calvo Sotelo, y daba fé de que él la oyó.
El asesinato de Calvo Sotelo fué lo que decidió el levantamiento del 17 de julio de 1936.
Como pueden ver nuestros lectores aquello era poco menos que el Paraiso de Mahoma. Por eso ahora lo echan de menos. Sobre todo aquellos que no lo han vivido.
P.S. No seguimos porque lo que vino después fué una guerra. Y si alguno encuentra que hemos sido muy pesados, le pedimos perdón. Aunque creemos que había que hacerlo.
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